🪫🔋 El problema de las baterías
Entrevistamos a Boris Gragera, fundador de la empresa del sector de las baterías Inition, para conocer mejor el estado de desarrollo de esta tecnología.
El sueño de robots humanoides trabajando en las fábricas 24/7 aún está lejos, pero no solo por la necesidad de un software basado en Inteligencia Artificial que comprenda mejor lo intrincado que es el mundo real, sino sobre todo por la capacidad actual de las baterías que implica tiempos de operación muy reducidos para estas máquinas.
Para profundizar en esta idea, en Robots Humanoides hemos entrevistado a Boris Gragera, un emprendedor español que ha emprendido desde Corea, USA y UK, para desarrollar lo que ahora es su empresa Inition, que ha reinventado la forma de fabricar los electrodos de las baterías. Gracias a esta tecnología se reduce el consumo energético de la producción de electrodos en un 50% y se requiere 10 veces menos espacio en la fábrica. También se eliminan los humos tóxicos en un proceso escalable que reduce la inversión de capital necesaria en un 65%.
🧑🔧 Emprender en el negocio de las baterías
Boris lleva 14 años trabajando en el mundo de las baterías como emprendedor, comenzó con el objetivo de mejorar una de las tecnologías que se utilizaban en defensa y seguridad, principalmente utilizadas por los gobiernos. En lugar de empezar una empresa desde cero, vio más conveniente invertir directamente en una empresa que estaba en una fase muy temprana y tomar una participación sustancial en el capital con la condición de que uno de los proyectos fuera desarrollar la tecnología que tenía en mente.
En un año y medio de investigación pura lograron aumentar la densidad energética de esta batería utilizada en defensa y seguridad en un 35%. Probaron con los clientes los primeros prototipos y, seis meses después, lograron una mejora del 50%, que era el objetivo final. Entonces lograron un gran interés por su tecnología al participar en la feria más importante de este sector en Estados Unidos, pero la cosa se truncó a principios de 2015 cuando sufrieron un incendio en su fábrica de Corea y lo perdieron todo, teniendo que empezar a construirlo nuevamente desde cero.
En este tiempo descubrió que la producción de baterías es un proceso extremadamente ineficiente, especialmente si se quiere hacer accesible a diferentes sectores de la industria. Es relativamente eficiente si se hace a través de una giga factoría, pero considera que las giga factorías no deben ser la única forma de fabricar baterías. Tiene que haber otras tecnologías que atienden a nichos de mercado, como la robótica, y que resuelvan problemas específicos.
Este proyecto, que empezó en Corea, lo trasladaron posteriormente a Nueva York y finalmente se está desarrollando en Oxford, tras haber realizado una ronda de financiación que les ha permitido llegar al estado actual de desarrollo de la tecnología y la llegada al mercado con sus primeros clientes.
El trabajo que está haciendo Inition tiene una conexión enorme con la revolución que va a ocurrir con los robots humanoides ya que su tecnología permitirá que no sea necesario ser un electroquímico, un ingeniero mecánico o un especialista en baterías para producir baterías. Están construyendo el hardware, pero al mismo tiempo incorporan inteligencia artificial para que el usuario solo tenga que indicar el tipo de mercado al que quiere destinar la batería y la máquina la producirá.
Su tecnología escala desde volúmenes de producción bajos, lo contrario de lo que ocurre con las giga factorías, que tienen que ser enormes porque la tecnología de producción no escala bien. Pero la demanda de baterías que generará la robótica será enorme cuando esta tecnología se implemente totalmente en el mercado.
Tenemos que ser conscientes de que hay un problema global de falta de mano de obra. Muchas personas no quieren realizar ciertos trabajos, básicamente no quieren estar apretando tornillos 8 horas al día, y estas labores serán asumidas por robots. La necesidad está clara y será cubierta por la robótica.
En cuanto al tema de la autonomía, hay mucha opacidad sobre el consumo energético de estos robots, lo que suele ser un problema. Un indicador que podemos utilizar es que en las demostraciones en vídeo nunca se ve un robot funcionando sin que haya cortes e interrupciones. Esto significa que han recargado la batería o incluso que el robot está conectado con un cable. Ese es el problema que empresas como Inition quieren resolver.
Es imposible que todos los robots usen la misma batería, igual que no todos los vehículos pueden usar el mismo combustible. La producción de baterías debe diversificarse en verticales específicas. Ahora mismo, el desarrollo tecnológico se centra en el hardware y lo que suele ocurrir es que al final del proceso, se dan cuenta de que se han olvidado de la batería.
Se han dado casos surrealistas de gente que diseña máquinas carísimas y luego se da cuenta de que no han pensado en dejar suficiente espacio para la batería. El robot hay que empezar a pensarlo desde la batería.
Por esto en Inition trabajan actualmente con fabricantes de robots de Oxford, y de Reino Unido en general, con el objetivo de caracterizar el consumo de batería, los picos de carga y descarga, y qué tipo de batería se va a necesitar para este tipo de aplicaciones, porque va a haber un mercado enorme cuando el precio sea aceptable y las utilidades que se ofrezcan será ilimitados.
🤝 Sobre el diseño de las baterías actuales para robots
El mundo de la batería debe ir hacia la personalización. En lo que se refiere a la fabricación de baterías de ion-litio existen múltiples combinaciones posibles, dependiendo de los materiales que se usen en cátodos y ánodos. Actualmente mucha gente espera el "santo grial" de la batería, pero fabricar una batería es extremadamente complicado y los materiales milagrosos que se han descubierto son demasiado costosos. Se habla mucho de las baterías de estado sólido, pero por ahora parece ser más marketing que realidad, además este nuevo tipo de baterías como mucho puede aumentar la autonomía de la batería entre un 30 y 40%.
El gran problema es que la industria de las baterías y la robótica actualmente no trabajan juntas, cuando deberían hacerlo si quieren llegar a un estado óptimo de desarrollo de esta tecnología.
La diferenciación que logren los fabricantes de los robots humanoides no solo vendrá por el software, sino también por la autonomía. Ahora mismo, los fabricantes de coches usan las mismas baterías sin diferenciación, pero en el futuro marcas como Ferrari o Lamborghini no querrán usar la misma batería que un coche estándar. En robótica ocurrirá lo mismo.
La industria debe encontrar soluciones para que una batería no cueste 100.000 euros o más. Las empresas emergentes de robótica no pueden permitirse contratos con gigantes como LG o Samsung, que no hablan de presupuestos por menos de 20 millones de euros. Por eso hay que desarrollar tecnologías de producción flexibles y personalizables. La robótica cambiará el mundo de las baterías y estamos en el comienzo de un cambio enorme.
Es fundamental diseñar los robots pensando en la batería desde el principio. Ahora mismo se apuesta mucho por el software y por los movimientos espectaculares, pero nadie habla de la autonomía real del robot. Además en el estado actual de desarrollo de los robots donde están siendo entrenados para que puedan desenvolverse por el mundo real, se requieren muchos sensores y un uso intensivo del software, lo cual consume mucha más energía de lo que debería ocurrir en el futuro cuando los robots ya estén entrenados.
📐 Innovación desde los primeros principios y la colaboración
Qué importante es lo que Boris nos ha contado en esta entrevista, sobre la necesidad de diseñar el robot desde los primeros principios, pensando desde el inicio de su diseño cómo la batería va a formar parte del conjunto, igual que hizo Tesla cuando ideó cómo debería funcionar un coche eléctrico para maximizar su autonomía y eficiencia en la conducción. Ahora con los robos hay que seguir el mismo proceso y esperamos que los fabricantes no dejen de lado este tema tan crítico.
Por otro lado tenemos la innovación abierta o colaborativa, especialmente en lo que se refiere a que los fabricantes de robots y baterías trabajen de manera coordinada para encontrar las mejores soluciones a la problemática de la autonomía de los robots. Es de esperar que a la vista del suculento mercado que se espera para la robótica humanoide los fabricantes de baterías se vayan posicionando también en este segmento. Al menos ya sabemos que LG con la inversión en Bear Robotics y Samsung con 1X y Rainbow, sí que están muy interesados en esta oportunidad.
Seguiremos atentos entonces a cómo el resto de fabricantes de baterías se van posicionando al respecto del mercado de la robótica, como lo han hecho ya en el de los vehículos eléctricos. Y esperamos que iniciativas como la de Boris Gragera con Inition tengan mucho éxito para lograr que la producción de baterías sea más eficiente.
Noticias de la semana en el sector de la robótica y la Inteligencia Artificial
🛒 Amazon ya trabaja con brazos robóticos en sus almacenes. “Enseñar a los robots a guardar objetos presenta un desafío tan grande que hasta ahora se consideraba imposible”. El siguiente paso deberían ser los robots humanoides.
🏭 Apptronik necesita fábricas para producir sus robots y para ello se ha asociado con Jabil, una empresa manufacturera global con más de 140 000 empleados en 100 ubicaciones en más de 25 países.
🌕 MIT ha desarrollado un sistema de robots enjambre que pronto viajarán a la Luna, con el objetivo de recopilar datos sobre el área que pueden ayudar a preparar a los astronautas para navegar por el terreno helado.
🇪🇺 Nomagic ha recaudado 41,5 millones de euros para impulsar la innovación en robótica e IA en Europa. En la ronda han participado el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, Khosla Ventures, Almaz Capital y el Banco Europeo de Inversiones.
🐉 Dragon Copilot es el primer asistente de inteligencia artificial por voz desarrollado por Microsoft para ayudar a los médicos a optimizar la documentación clínica, mostrar información y automatizar tareas.
💰 Anthropic ha recaudado 3.500 millones de dólares con una valoración post-money de 61.500 millones de dólares. Impresionante lo que está logrando esta startup que sin duda está dando la talla frente a OpenAI como líderes de la industria de la Inteligencia Artificial.